Lo verdaderamente importante presenta: en Grecia gana el no, ¿y ahora qué?
Hay un selecto club que ayer celebró la victoria del "no" en el "greferéndum" promovido por Tsipras. Sin embargo, hay una realidad más profunda en esta victoria del nuevo (y molesto) gobierno heleno: los derechos de la ciudadanía griega. Por eso, este resultado es importante y no por otra cosa, como nos quieren hacer ver. Hoy en el blog hablamos del referéndum que ha dado a los griegos una nueva perspectiva, una segunda oportunidad.
Bandera de Grecia. Fuente: banderas-mundo.es
Han sido numerosísimas las reacciones a los resultados del referéndum griego de ayer, en el que más del 68% de los que acudieron a votar dijeron "no" a las propuestas de la Unión Europea. Desde el propio estado heleno y hasta en los periódicos de medio mundo, muchas personas se han dispuesto a opinar, muchas veces sin conocimiento de causa, de lo que les parece este hito en la historia continental. Los periódicos españoles se despiertan hoy con portadas de todos los tipos. El País lleva a su primera plana la sentencia que todos nos esperamos: "Hora de la verdad en Europa tras el rotundo 'no' de Grecia"; mientras que El Mundo, como suele ser habitual, va más allá y afirma que "Grecia dice 'no' a Europa". El ABC, a su vez, se permite el lujo de sacar conclusiones emocionales al titular su edición de hoy de la siguiente manera: "Grecia venga su ruina con un 'no' a Europa". Por último, La Razón lleva a su primera plana una frase cargada de demagogia: "Sin OXIgeno", en la que juega con el vocablo griego para negar, "oxi".
Portada de La Razón del lunes, 6 de julio de 2015. Fuente: kiosco.net
Pero más allá de opiniones personales, el "no" griego de la jornada de ayer significa abrir una nueva ventana desconocida hasta la fecha: la ventana de la negociación en la Eurozona. Grecia ha dado un portazo y se ha mostrado beligerante con el viejo continente. Un gobierno joven ha traído de cabeza la estabilidad centenaria del continente, y en eso podemos estar todos de acuerdo. Sin embargo, Tsipras ha demostrado que se puede llevar la contraria a las medidas austeras que, día tras día, se imponen desde Alemania y el FMI (Fondo Monetario Internacional). Solo falta por ver si conseguirá salir adelante. Precisamente, el primer ministro griego salió ayer a festejar los resultados del referéndum pensando en que han dado un espaldarazo a su gestión. No obstante, no se enteró de que ayer no era el día de celebrar victorias personales, sino colectivas: este domingo quedará en el recuerdo de todos los europeos porque fue el día en el que la ciudadanía griega, la más antigua de nuestro continente, volvió a recobrar parte de su dignidad milenaria, perdida desde hace muchísimo tiempo.
Ciudadanos griegos celebrando la victoria del "no". Fuente: El Confidencial
Y es que, más allá de victorias políticas, ayer fue el día más feliz para muchos habitantes del viejo país, que por fin se vieron valorados. Ancianos, adultos, jóvenes, mujeres, hombres, ricos y pobres se unieron ayer en la plaza Syntagma para festejar un "no" histórico: el "no" a los abusos de Europa y de la troika, el "no" a seguir malviviendo por orden europea, el "no" a la pérdida de la soberanía nacional. Grecia tiene motivos para sentirse orgullosa, pero veremos cuánto le dura la alegría a los griegos. En una carrera de fondo, ellos se han adelantado. Hay que estar pendientes de la reacción de sus contrincantes que, ya desde hoy, se van a reunir para intentar vencerles finalmente. Solo el tiempo dirá si los griegos hicieron bien en revolverse contra el poder del viejo continente. Personalmente, espero que no tengamos que volver a verlos en esta situación tan desesperada: Europa, por fin, debe perder en algo.
Christian A.A.S.
@ChrisAfonSan